Poesía por una maternidad libre de violencia.

Hoy, 25 de Noviembre, se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y queremos presentarles un proyecto que busca difundir un mensaje de paz a través de la poesía. Silvia Favaretto, mamá y poeta, nos invita por medio de la revista digital Progetto 7LUNE a participar en una antología de landais escritos por autoras latinoamericanas para publicarse en formato ebook gratuito. Este es un subgénero poético casi exclusivamente femenino, como nos lo explica en este artículo donde podrán encontrar más información y ejemplos de landais. Extraigo algunos fragmentos:

“En Afganistán, como en muchos otros lugres de la tierra, la violencia sobre las mujeres es un acto de barbarie cotidiana. Las mujeres pashtún utilizan en secreto una forma de poesía breve, los landais (dísticos con un primer verso de nueve sílabas y el segundo de trece), para denunciar los abusos a los que están sometidas. Landay significa en lengua pashtún “pequeña serpiente venenosa”, y es una poesía de rebelión: directa, a veces sensual, o bien trágica y hasta satírica.  (…)

Existe en Kabul una asociación de escritoras que se llama “Mirman Baheer” que recoge los landais de las asociadas  y actúa como una secta secreta: una mujer, ella misma poeta,  Ogai Amail, contesta al teléfono de la asociación según horarios concordados, y escucha y transcribe los poemas recitados por mujeres a las que no se les permite componer poemas y ni siquiera saber  escribir. De la asociación hacen parte también periodistas y profesoras que pueden permitirse el lujo de recitar los poemas de todas por la radio haciéndolos llegar de esta forma de casa en casa, en lugares en los que a las adolescentes no se les permite ni siquiera salir de los muros domésticos.”

En Italia se ha importado esta forma poética con el intento de difundir los mensajes por una vida libre de violencia y Progetto 7LUNE lo trae a nosotras, podemos aprovecharlo como una plataforma de expresión creativa para mostrar la situación de las mujeres en nuestro país mientras nos solidarizamos con las hermanas de otras geografías. A continuación les paso un par de landais de Silvia Favaretto sobre lactancia:
 

Amamantaré a mi bebé
hasta que él quiera, no hasta que tú quieras
“Allatterò il mio bimbo
finché vorrà lui, non finché vorrai tu” 

  
El derecho de amamantar,
como el de amar, no se discute
“Il diritto di allattare,
come quello di amare, non si discute"


Silvia amamantando a su hermoso hijo de 29 meses. Foto por: Anna Bussolotto.

Las invitamos a escribir desde su propia experiencia como mujeres y madres, puede ser sobre lactancia, parto respetado, violencia obstétrica, crianza respetuosa, sobre ser amantes, disidentes, soñadoras o aquello que las inspire. Esperamos sus textos por inbox en la página de fb:

https://www.facebook.com/CrianzaAlternativa
o en el correo: crianza.alternativa@gmail.com

Para ver otros landais e inspirarse las invito a descargar gratuitamente el suplemento especial sobre landais:
http://www.rivista7lune.blogspot.it/2014/11/luna-rossa-supplemento-7lune-su-landis.html

y leer el artículo que explica de qué se trata (seguir los links con más ejemplos):
http://rivista7lune.blogspot.it/2014/09/articulo-sobre-landays.html

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Cuando las hermanas se reúnen, alaban a sus hermanos.
Cuando los hermanos se reúnen, venden a sus hermanas.

Mi cuerpo está fresco como una hoja de henna:
verde por fuera; carne tierna por dentro.

Si la hora no ha sonado, la muerte no vendrá.
Aunque arda el mundo, amor mío, no te asustes.

Nací mujer en tierra seca,
pero guarda mi vientre esperanza futura.

Historia de Parto Prematuro: Elizabeth y Victor Samuel.


Hermoso bebé Victor Samuel.
Uno nunca cree estar listo para el parto, siempre nos llegan dudas y temores, pero un parto prematuro es algo inexplicable los temores están a mil por hora  pero el pensamiento más fuerte es si tu hijo vivirá. A pesar de todos los cuidados extremos que hubo en mi embarazo nada detuvo que Mi Samuel  llegara al mundo a las  28 semanas  pesando tan solo 935 kg y midiendo 35 cm, el nació respirando, llorando y sobre todo luchando.
Yo no supe nada de mi bebe, me estaba muriendo por dentro y nadie se compadecía de mi sufrimiento, mi esposo, papas y hermanos estaban en la misma situación, ni enterados que Samuel   había nacido pensaban que tratarían de detener el parto unos días más, a la hora de visita que fueron 4 o 5 horas después llego mi esposo con una cara de felicidad  dijo YA SOY PAPA,  Samuel está bien pero dicen los doctores que  las primeras 72 horas son cruciales y yo estaba en negación,  algo me decía que no todo estaba bien como el trataba de aparentar.
Les platico que estuve internada en un cuarto con 5 mujeres y todas con su bebe, ha sido la experiencia más cruel que  alguien me pudo haber hecho, como se les ocurre hacernos eso a las madres de bebes prematuros???  Era una broma?? Que les pasa?? todas disfrutando de las primeras horas de sus bebes, cambiándolos , abrazandolos y amamantandolos, y yo simplemente vacía con una herida en mi vientre y un dolor inmenso en mi corazón.
Tuvieron que pasar 19 horas para saber su estado, ahí estaba a viendo a lo lejos una incubadora y un mundo el cual yo desconocía su existencia, la terrible y milagrosa sala de Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN).
Les mentiría diciendo que todo fue color de rosa, que no paso nada, lo único que les puedo decir es que Samuel tiene una fortaleza única y  a la semana de nacido por medio de una sonda acepto mi leche, era para mí un milagro, siempre supe que quería amantar estaba decidida hacerlo, pero pensé… Se me adelanto 12 semanas?? Tendré leche?? Mi cuerpo está listo???  Pero con un sacaleches eléctrico, empecé de poco a poco y con una asesoría excelente en el hospital  (hospital que al principio odie y ahora les agradezco tanto) nos enseñaron como transportar la leche al hospital, como almacenarla en casa  y me explicaron que mi hijo la ocupaba como ORO, que cada gota le salvaba la vida, así que decidí almacenar, almacenar y almacenar porque no sabíamos cuantos días Samuel estará hospitalizado. 
A  los dos meses  que él estaba fuera de peligro me  lo cambian de hospital, pero semana del traslado empezó a sentirse mal aparentemente con mi leche, así que tomaron la decisión de darle FORMULA, apenas que Samuel tenía el peso necesario para empezar a mamar y dejar la sonda, nos sentimos devastados  no tuve la oportunidad de pegarlo a mi pecho pensé, algo mas que nunca podre hacer con mi hijo aunque nunca perdí la esperanza de que siguiera alimentándose exclusivamente con mi leche.
En este nuevo hospital donde permaneció casi 1 mes más,  nos dieron la oportunidad de estar todo el día con él y de participar más en su cuidado, también realizamos la técnica canguro, ese contacto piel a piel que tanto necesitábamos, ya que  este contacto favorece mucho al  regulación de la respiración, control de la temperatura corporal y fomenta la lactancia, cosas que son indispensables para un bebe prematuro, el tenerlo sobre mi pecho fue la sensación más maravillosa del mundo  el momento de sentir a mi bebe, sentir que el pertenecía ahí y estar juntos después de 2 meses de tan solo poder tocarlo brevemente y no tenerlo en mis brazos.

Tuvieron que pasar 86 días para que Samuel llegara a casa, ha sido el día más feliz de nuestras vidas el momento de prepararlo para su salida, subirlo a su sillita y llevarlo a casa, teniamos una alegría inmensa, por fin Samuel dormiría con nosotros con su familia.
Aunque me dijeron que por el momento solo formula  ya estando en casa de repente hacíamos trampa nunca había mamado así que no sabía como hacerlo me deje llevar por mi instinto, al tenerlo en mi pecho con la técnica canguro, sentía la necesidad de alimentarlo y el me buscaba  y lo pedía a gritos, Samuel odiaba el biberón y la formula el quería la lechita de mama, era un martirio para el alimentarse con biberón con el apoyo de un pediatra prolactancia  y de la liga de la leche, Samuel Relacto, ahora a sus  8 meses no pensamos dejarlo hasta que el y yo estemos listos, sin importar las críticas y las opiniones de la gente, tambien casi cometí el error de déjarlo en su cuna para que el  aprendiera a dormirse solo, que llore decian, pero como dejarlo? tantos días en incubadora solo, lo deje un par de noches pero sentía que algo no estaba bien que su lugar era con nosotros, el solo quería estar con sus papis, sentirse protegido, si yo tenía esa frustración de haber estado separados… como se sentiría él? Si yo no entendía pues el menos.
Así que sin saber lo que significaba el concepto de Crianza con Apego, lo cual hasta después conocí, mi esposo y yo empezamos a practicarlo  siguiendo las necesidades de Samuel y nuestros instintos, ahora el toma leche a libre demanda, practicamos el colecho y lo llevamos lo más que podemos en brazos y en fular y es un bebe feliz, un bebe amoroso  y lo amamos sobre todas las cosas es nuestro milagro de vida y cada día agradecemos  a dios de habernos mandado a este niño tan valiente y tan fuerte. 
Esto es un pequeño fragmento  de grandes y milagrosas historias en honor a todos esos guerreros,  ya que 1 de cada 10 bebes pasan por un parto prematuro los cuales vencen operaciones que ponen en riesgo su vida, por tantas complicaciones durante su estancia en UCIN , por cuidados extremos aun estando en casa y por el sufrimiento de los padres, asi que cuando conozcas a un bebe prematuro, que tus primeras palabras no sean QUE CHIQUITO  o el típico POBRECITO, nadie sabe la historia que hay detrás de estos guerreros y lo que han luchado para estar en este mundo ellos son unos valientes y merecen nuestro respeto y sobre todo comprensión.
Le doy gracias a mis padres y hermanos que siempre estuvieron con nosotros desde el principio de mi embarazo cuidándome en todo momento y nunca dejaron de darnos unas palabras de aliento inclusive cuando se que ellos sufrían también de tener a nuestro pequeño internado, gracias a mi esposo por ser un hombre y padre ejemplar porque sin el amor que nos tiene muchas cosas no serían posibles  por esa paciencia  y dedicación que nos regalas día con día.
Mi VICTOR SAMUEL, tu nombre para mi  es perfecto, ya que tu nacimiento fue una VICTORIA y fuiste un  HIJO PEDIDO A DIOS, gracias por la fortaleza que me haz enseñado, trataremos de no defraudarte como padres y siempre estar ahí cuando más nos necesites, te amamos tanto hijo mío.

Querido público: tengo una hija y no soy heterosexual.

No me identifico completamente con ninguna etiqueta: bisexual, omnisexual, pansexual, queer, heteroflexible, homoflexible, ninguna de ellas me define ni tengo un particular interés en hacerlo. Prefiero decir eso, que no soy heterosexual o, simplemente, que soy sexual.

Antes de ser mamá, podía enfrentar toda la ignorancia y discriminación con la mano en la cintura, no tenía miedo a las consecuencias. Pero ahora, cualquier consecuencia va a afectar a toda mi familia, no nada más a mí. Desde que me embaracé, el juego cambió, sentí una enorme necesidad de adaptarme, de criar a mi hija dentro de las normas, empecé a vestirme como una señora seria y a ser discreta, eso incluyó disimular mi identidad sexual.
No tuve que hacer ningún esfuerzo: embarazada y con una pareja de otro sexo, todas las personas que he conocido desde entonces asumen que soy heterosexual, yo, simplemente, no los saco de su error si no son personas de confianza. Y, ¿por qué habría de hacerlo? Por un lado, es asunto mío, no tengo por qué anunciárselo a nadie ni andar dando explicaciones, it shouldn´t be a big fucking deal. Por otro, todavía existe mucha desinformación y prejuicios de lo que significa ser lgbtiq. 

Por ejemplo, una vez publicamos una historia sobre una pareja homoparental y la borraron de fb a petición de una persona que sigue la página; cuando postée sobre eso, indignada, hubo quien lo aplaudió, la percepción de muchos es que los padres y madres lgbtiq dañamos a nuestros hijos. Como madre, les puedo asegurar que amo a mi hija, la cuido, la educo y proveo para ella con la misma tenacidad que cualquiera.


Tenía preparado todo un post sobre la relación entre mi identidad sexual y mi experiencia como mamá, pero es algo muy íntimo y en este momento de mi vida no tengo la solvencia emocional para compartirlo, tal vez más adelante. De cualquier forma, no quiero dejar pasar este 11 de Octubre, Día Internacional pasa Salir del Clóset, sin hacer una declaración pública. Sí, me expongo a ser juzgada, criticada, expongo a mi hija al cuchicheo, pero como bien dijo mi compañera Diane, si trato el tema con miedo, le enseñaré a mi hija que es algo que hay que temer y, para mí, con todo respeto, educar a mi hija es más importante que la opinión de cualquiera de ustedes.

Además, como personas LGBTIQ todavía somos un grupo vulnerable de la población y, como tal, nos fortalece identificarnos, unirnos y apoyarnos. En nuestro contexto, salir del clóset puede ir más allá de reafirmar nuestra identidad, abrir la puerta para una vida más auténtica y relaciones más honestas; es un verdadero acto de solidaridad con quienes enfrentan discriminación, rechazo, violencia. Al declarar públicamente que podemos convivir en pareja o amar a alguien de nuestro mismo sexo o a más, contribuimos siendo visibles ante nuestra comunidad y así, romper ideas preconcebidas y crear formas de convivir pacíficas, igualitarias e incluyentes. Es levantar nuestra voz y hacerles ver que somos profesionistas, artistas, obrerxs, policías, deportistas, estudiantes, desempleadxs, somos madres, padres, somos tus hijxs, estamos en todos lados y hemos decidido abandonar el anonimato.

Espero que esto de pie a discutir mucho más el tema y si hay otras mamás y papás en esta situación cuenten con un espacio para expresar su sentir, sus sentires, para encontrar oídos empáticos y abrazos fraternales.

Over and out ;)

¡Compartiendo nuestras aventuras!




Comencé a portear (cargar a tu bebé en un rebozo o cangurera) cuando mi hija cumplió sus 3 semanas, de hecho fue mi esposo el primero que la porteo.  Estábamos muy emocionados, teniamos una cangurera, fue un regalo de una señora de mi oficina y en ese entonces aun no habíamos comprado carreola así que decidimos salir por primera vez los tres y la metimos a la cangurera.  Se sintió, ¡muy bien!  Me encanto que la teníamos cerquita, así podía ver si estaba respirando bien, si necesitaba algo, y como en ese tiempo hacia frio, se mantuvo calientita con mi esposo y durmió desde el momento que la metimos en la cangurera hasta el momento que regresamos al coche.

Semanas después, compramos la carreola pero siempre que estaba en ella me la pasaba revisándola a ver si estaba bien, me tenia que agachar o aparte siempre lloraba en ella, mi niña de mes y medio quería los brazos de mamá.. y pues yo siempre la cargaba, la tomaba con un brazo y empujaba con mi otro brazo la carreola. Esto paso varias veces hasta que me rendí y deje la carreola por la paz y la comencé a cargar en rebozo o cangurera mas seguido.

¡Para mi el porteo ha sido maravilloso! La verdad que ha hecho nuestra vida mas fácil y mas divertida. Para viajes, el porteo ha sido un salva vidas, no tenemos que cargar con un accesorio grande (la carreola), y podemos llevar a nuestra hija cerca de nosotros y segura, aparte puede ver todo los paisajes a nuestra altura y podemos directamente compartir esa experiencia juntos. 

Y no nomas en los viajes pero en la vida diaria el porteo nos ha ayudado mucho, mi esposo y yo porteamos a nuestra hija en nuestras idas al súper mercado, cuando llevamos a caminar el perro, labores del hogar (como lavar platos), haciendo ejercicio (¡esas 15 libras extras que llevas cargando te ayudan mucho!), para dormirla y arrullarla, para actividades de mi trabajo (me la he llevado a presentaciones, limpiezas de playas, juntas, etc.), entre otras actividades.

El porteo nos ha permitdo tener mas experiencias juntas, poder vernos a los ojos mas seguido, porder darnos mas besos y abrazos mientras caminamos y poder compartir momentos únicos.

Nuestro rebozo y cangurera definitivamente ha sido el producto que mas hemos usado desde que nació nuestra hija y ese apego que viene con abrazar y cargar a nuestros hijos trae muchos beneficios al largo plazo. Los ninxs que son porteados crecen con mas confianza en si mismo y en sus padres y llegan a ser mas independientes. Para los que creen que cargándola mucho la va a embracilar, luego ya no van a querer caminar o se van a "malcriar", pues les digo que YA QUISIERA que mi hija estuviera embracilada, a sus 13 meses comenzó a caminar y desde entonces me pide suelo mas que brazos, pero aun así cada que me pide que la cargue o me pide que la suba en el rebozo, jamás se lo niego, el tiempo pasa tan rápido, pronto tendrá 13 años y ya ni abrazarla va a querer probablemente, así que aprovechen ¡carguen, apapachen, abracen y compartan todas las aventuras juntos!

-Dee

¡Feliz semana internacional del porteo! Por una crianza en brazos y por una crianza feliz.

Aquí algunas de nuestras fotos porteando a nuestra hija Alessandra.




15 consejos en como ayudar a una reciente mamá

Si ya eres mamá sabrás lo que tiene que hacer o quisieras que te hubiera hecho los primeros meses que llego tu pequeño(a), especialmente cuando eres primeriza y no sabes que esta pasando, estas tratando de aprender y conocer a tu bebé, y no tienes cabeza para nada mas que no sea el o ella. 

Tener visitas para muchas es una cosa maravillosa, quieres presumir y que conozcan a tu bebé,  y para tus familiares o amigos es un momento muy esperado, pero aunque este momento pueda ser muy especial, también puede ser un poco abrumador. 

Aquí esta una lista que encontré en línea que ha concretizado y simplificado muchas exigencias (muy merecidas) de una reciente mamá.

¿Estas de acuerdo con la lista? ¿añadirías algunas?  


Lista e imagen tomada del Blog de Sarai Llamas.

Trabajar y amamantar: mi mayor hazaña

Mi puerperio como el de muchísimas madres trabajadoras, fue interrumpido tras pasar la cuarentena, que ahora me doy cuenta que es un período de tiempo muy insuficiente para estar exclusivamente con tu bebé recién nacido. Es difícil regresar a trabajar demasiado pronto y por varias causas, psicológicas, emocionales y fisiológicas. Pero recuerdo que una me preocupaba sobre todo, que era el poder seguir amamantando. Iba a tener un trabajo de 8 horas y media, con una hora de comida, ¿Cómo iba a mantener mi producción de leche sin poder amamantar durante todo el día? Llevaba desde que nació mi Goldo encerrada dando chichi y leyendo blogs de lactancia (sobre todo The Badass Breastfeeder que es mi ídolo y quien me inspiró a iniciar Crianza Alternativa) y sabía perfectamente que la leche funciona por oferta y demanda. Entre más succione el bebé más leche produces. Quería amamantar con todo mi corazón y tenía miedo de no lograrlo. Sí lo logré y me siento muy orgullosa y satisfecha. Esta es mi historia:

EL PRIMER DÍA

Mi primer día de trabajo, yo pensé que solo iba a una entrevista o algo así, pero inicié de inmediato y tenía que quedarme aproximadamente 6 horas, lo cual no tenía contemplado. Para empezar nunca me había separado tanto de mi bebé, tenía una foto de él que veía cada 5 minutos y unas enormes ganas de llorar ya que sentía que lo estaba abandonando, no estaba para nada preparada para dejarlo todavía. Creo que nadie te prepara para eso, la sociedad te vende la imagen de la mujer que a los 40 días vuelve a su vida normal, como si ser madre no fuera una transformación total que requiere meses o años de adaptación. En segundo lugar, tenía unos pechos que conforme iban pasando las horas se me iban poniendo duros y enormes y además me dolían, ya que no había llevado un saca leches ni iba preparada para extraerme leche. Parecía actriz porno con esas chichis (yo que siempre fui de poca chichi) me sentía súper rara.  Por suerte no tuve accidentes ese día. 

Desde mi primer día de trabajo hablé con el administrador, quien se puso rojo rojo cuando le mencioné que necesitaría un lugar para sacarme leche. Ni siquiera entendió de qué le hablaba al principio, por lo cual tuve que explicárselo muy gráficamente y como que se puso muy incómodo el momento porque yo bien segura de mi misma explicándole, pero él reaccionó medio bochornosamente y me dijo que lo podía ver con las secretarias que trabajaban en mi departamento, al cabo ellas eran mujeres, para que ellas me asignaran un área. Pues las secretarias entonces me designaron nada más y nada menos que el baño. 


EL BAÑO

La primera vez que entré al baño para sacarme leche, dije, esto no va a funcionar. Era el único baño de mujeres del área y yo tenía que cerrarlo con llave durante 5 - 10 minutos cada 2 o 3 horas. Obviamente me encerraba y todo mundo tocándome la puerta desesperadamente y escuchaba comentarios como "¿Por qué se encierra?" "¿Qué está haciendo?". Me entretenía pensar qué se estarían imaginando que yo hacía al encerrarme y al escuchar el sonido del sacaleches. Además, la única conexión eléctrica estaba casi en el techo, entonces tenía que conseguir una silla de alguna oficina, llevarla al baño (ahí si que no pasaba desapercibida) treparme en ella para conectar el sacaleches y después sacarme leche durante varios minutos con toda la fila de señoras mionas tocándome la puerta. 


LA MASTITIS

Eso solo duró como dos días y al tercer día me dio mucha flojera y simplemente no me saqué leche, además de que fue un día muy activo y hubo muchísimo trabajo. Recuerdo que me tuve que quedar hasta tarde ese día y era una desesperación porque además la niñera se tenía que ir y no tenía a nadie que fuera por el Goldo, pero además cada vez que me llamaba se escuchaba el llanto del bebé y yo sufriendo como jamás en la vida. Cuando por fin llegué a mi casa exploté en llanto y en fiebre pues al no sacarme leche en todo el día me había dado mastitis sin que yo me diera cuenta, ya que cuando no sacas la leche durante tantas horas, se crea una infección porque se tapan los conductos por donde sale la leche. Nuestro reencuentro de ese día fue de muchas lágrimas y eso que solo llevaba menos de la semana trabajando. Entonces le llamé a mi maravillosa pediatra, la Dra. Cristela Tagle, quien es experta en lactancia y me recomendó tomar un baño de agua caliente y masajearme los pechos, tirando la leche que saliera. También me puse paños de agua caliente en los pechos y tomé Tylenol. Hablé con mi amiga Ash, quien por cierto fue la primera en orientarme sobre lactancia desde el embarazo y con quien meses después creamos Crianza Alternativa. Ella me contó que cuando su niño era un bebé lactante ella pasó por lo mismo y la mastitis se le curó pegándose al niño al pecho durante varios días, solo con eso. Y así fue, me lo pegué por varios días. La cosa es que al día siguiente yo tenía que ir a una reunión importante en San Diego, para lo cual debía de salir de mi casa a las 4 am, pero en verdad hubiera sido imposible en esas condiciones ya que pasar otro día sin poder sacarme leche hubiera resultado en una grave infección, sin hablar de algún accidente de leche en plena reunión. Pues ahí estaba yo, quedando súper mal en mi nuevo trabajo, sintiéndome la peor madre y la peor profesionista. Pero poder pasar esos 4 días amamantando, fue como regresar poquito a la cuarentena y lo disfruté. 


DE REGRESO AL BAÑO

Ya el lunes al regresar al trabajo pues tuve que ingeniármelas para sacarme leche sin hacer tanto alboroto. El sacaleches que me había regalado Ash estaba súper chingón, era como un Ferrari de los sacaleches, era eléctrico y podías sacarte de ambos pechos a la vez. Pero era muy complicada la logística de conectarlo trepada en una silla y cerrar el baño con seguro cada dos horas, necesitaba algo discreto y rápido. Según yo me iba a comprar un sacaleches manual, pero en ese momento se me ocurrió encerrarme en el excusado y sacarme la leche manualmente. La Dra. Tagle (pediatra del Goldo) me había enseñado como. Y sorprendentemente sí pude y fue mucho más fácil, práctico y discreto.

Así pasé aproximadamente 4 meses, sacándome la preciosa leche materna, que solo una madre que amamanta y trabaja sabe que el valor de cada gota es oro, por lo difícil que es producirla y sacarla. Ahí estaba yo sacándome ese oro líquido con mi propia mano, dentro de un baño apestoso, mientras escuchaba a señoras haciendo sus necesidades de todo tipo al lado mío, o mientras me enteraba de sus chismes ya que muchas veces ni se daban cuenta de que estaba ahí, incluso varias veces me apagaron la luz y me quedé a obscuras con mis recipientes de leche en mano sin saber como iba a poder salir de ahí. Poco a poco fui conociendo a mis colegas femeninas y les fui platicando lo que hacía en el baño, que era un misterio para todas al principio. Algunas la verdad se portaron súper lindas, siempre apoyándome si alguien preguntaba por mi, o de distintas formas. Algunas la verdad se pasaban de mamonas. Recuerdo que una vez una empezó a gritar que había algo derramado en el piso del baño de mujeres, que por favor viniera rápido la señora de la limpieza a quitar eso tan raro que pareciera ser leche. Casualmente lo gritaba en el pasillo al lado de mi lugar. La verdad ni siquiera era leche materna porque en primer lugar no se me tiraba ni una gota, en segundo lugar si se llegara a derramar algo, no sería distinguible del agua ya que es una substancia muy finita y en tercer lugar, !que no mame! ¿en que le afectarían unas gotas de leche a comparación de todas las otras substancias y fluidos que había en el baño y con los que yo tenía que convivir al extraerme la leche?. En todo caso la ofendida sería yo. La verdad nunca como en esos meses me di cuenta de algo muy triste: las mujeres son muchas veces quienes se ponen el pie entre ellas. Yo pensaba que por ser mujeres y madres me iban a apoyar, pero en varias ocasiones fue todo lo contrario. Por suerte no eran todas, pero las que eran, !Como jodían!

Chichi en la casa

LA GUARDERÍA
Para lograr mi objetivo que era seguir amamantando exclusivamente a bebé Isauro, algo clave fue la guardería donde lo cuidaban. En un inicio yo prefería una niñera, para no tener que sacarlo de su hábitat tan chiquito, alguien que lo cuidara en nuestra propia casa, era lo ideal. Sin embargo yo no tengo familia en Tijuana, ninguna tía o abuela o ni siquiera alguien de confianza con quién dejarlo. Isauro (papá) se la rifó la primera semana, cuidando todo el día al Goldo y la segunda semana mi comadre Erika lo cuidó. Pero llegó el momento de tomar una decisión y consideramos que dejarlo con una desconocida no era seguro. Es difícil ya que te entran tantas dudas. Por ejemplo yo tengo mi estilo de crianza y posturas muy firmes con respecto a ciertos temas. Yo no creo en dejar a los bebés llorar. Creo que en cuanto empiezan a estar inquietos, si es posible antes de llorar, se les debe cargar, alimentar, arrullar, cantar, o cualquier cosa, hasta que estén bien. Además creo en darles leche a libre demanda, no con horarios. Se que en nuestra cultura regularmente se piensa lo contrario y no toleraba la idea de una señora que lo ignorara y lo dejara llorar o simplemente, al no ser su familiar, que no lo tratara como yo lo trataría. Hicimos un casting exprés de las guarderías de Tijuana. Llamé a la primera y me dijeron que "cada dos horas les damos su fórmula y les cambiamos sus pampers". Obviamente les colgué porque # 1. el Goldo no sigue horarios, # 2. el Goldo no toma fórmula y #. 3 el Goldo no usa Pampers. Pensé para mis adentros, no mames ¿qué va a pasar?. 

Así fui llamando una por una hasta que una me llamó la atención por su nombre "Cuidados con Amor". Aparte de lo cursi que pueda sonar, yo en esos tiempos estaba informándome sobre lo que es la Crianza con Apego, Crianza Natural o Crianza con Amor. Me sonó muy similar y por eso me llamó la atención desde el inicio. Desde la primera vez que llamé fueron totalmente abiertos y la verdad siempre estaré agradecida con ellos por como cuidaron de mi hijo. Para empezar, apoyaron el hecho de que yo quisiera darle pura leche materna y cuando les expliqué como debían de descongelarla en baño maría y almacenarla en el refrigerador o congelador, ellas ya sabían qué onda, pues cuidaban a varios niños amamantados. Hay una esperanza, pensé. Ya después he escuchado de guarderías del Seguro donde solo le dan fórmula a los niños y de la marca que la guardería quiera. No se si todas, pero para mi hubiera sido impensable. Además de esto siempre, siempre me siguieron el rollo con todos mis métodos de crianza. Es por esto que el Goldo era el único bebé en utilizar pañales de tela en la  guardería y cuando cumplió seis meses que debía iniciar con las papillas, les pedí que utilizaran el método de alimentación autorregulada por el bebé (Baby Led Weaning) y le dieran pura comida entera y me apoyaron totalmente. Además, !tenían cámaras en todas las salas!. A la hora que yo quisiera podía meterme a la página de internet con mi clave de acceso y ver qué estaba haciendo el Goldo. Eso me daba muchísima confianza. Pero volviendo al tema de la lactancia, las "Misses" de la guardería, yo sentía que eran mi equipo, mis aliadas. 

Todos los días en punto de la una de la tarde yo salía disparada en el carro rumbo a la guardería, entraba por el Goldo y teníamos un gran reencuentro de una hora. Los primeros meses esa hora era para darle pecho y arrullarlo, en verdad era un momento necesario para los dos, era uno de los momentos que esperaba diariamente. Como a los 5 meses ya el Goldo empezaba de curioso y no quería quedarse en el carro, así que en el rebozo nos íbamos a caminar. Íbamos caminando y yo le enseñaba los árboles, las flores, las piedras, los carros y le iba platicando y nombrando cada cosa y para él todo era fascinante. Casi siempre terminaba tomando leche y durmiéndose y así se lo dejaba a las Misses, me regresaba de volada al trabajo y a las 6 de la tarde volvía por él para llevarlo a casa.

Una de nuestras caminatas diarias afuera de la guardería, el Goldo de 5 meses y la mamá Embracilada/rebozera

Esa era mi rutina diaria, ir y venir entre oficina y guardería. Sacarme leche cada dos o tres horas. Llegar a mi casa en la tarde a pasar un par de horas con mi niño hermoso, leyéndole un cuento, dándole masaje, jugando con él y dándole pecho para dormir. Cuando se dormía era mi hora de lavar y secar pañales de tela, congelar y poner fecha a toda la leche materna y lavar biberones. Al día siguiente lo mismo. Era agotador pero era necesario. Yo sentía que estaba en una misión.  

En la guardería tenían una bitácora donde podías escribir los comentarios y cuidados especiales de tu bebé. Yo trataba de dejarles diario un recadito referente a la lactancia materna, así como "Nunca agitar la leche materna, batir suavemente por favor" o también "dar leche a libre demanda, no con horarios", otros días ponía "no dejarlo llorar", aunque esto fuera utópico de mi parte pues se que es imposible en una guardería estar al pendiente de tantos niños y no dejarlos llorar, pero yo seguía insistiendo. Siempre hubo excelente comunicación y además el Goldo aprendió muchas cosas con las Misses, como a interactuar con otros niños, le daban estimulación temprana, música y yoga. Mejor lugar no pude haber encontrado.


LA PRODUCCIÓN DE LECHE

Como mencioné, mi mayor preocupación y yo creo que de casi todas quienes decidimos trabajar y amamantar, es el seguir produciendo suficiente leche. Para empezar nadie sabe cuánta leche es suficiente, nadie te dice. Y eso es en parte porque cada bebé es diferente y toma diferentes cantidades, por lo mismo me parece irracional la manera de alimentarlos con fórmula, cada dos o tres horas dándoles la misma cantidad de onzas a todos, como relojito, como fábrica, como robots. Si cada ser humano es diferente, me parece de lo más absurdo. Pues a la hora de sacarte la leche es lo mismo. Yo en vez de quebrarme la cabeza preguntando a extraños y conocidos, mejor observaba al Goldo y las cantidades que él tomaba. Él siempre marcó la pauta en todo. En un inicio se tomaba como 7 onzas así que yo trataba de sacarme 10 oz. diarias para estar un pasito adelante. Luego empezó a tomar 10, 15 y en un período tomaba entre 17 a 20 onzas diarias. Así que ahí me veían sacándome 20 onzas de leche diaria, me sentía como toda una vaca, hasta estaba pensando poner una repostería o algo así. Es impresionante como funciona nuestro cuerpo, de lo que somos capaces. 

En algunos períodos me entraba la paranoia y sentía que no estaba produciendo leche, así que tomaba agua como loca deshidratada, comía como soldado (eso es siempre pero ahora con la amamantada tengo un buen pretexto) y me tomaba todo tipo de remedios. Llegué a tomar avena casi diario, aunque no hay nada comprobado sobre si eso ayuda o no, pero creo que tomar avena no hace daño a nadie así que lo hacía. Además me tomaba mis cervecitas de vez en cuando, que tampoco ofendían a nadie. Pero un recurso interesante fue el té de Fenugreek (alholva o fenogreco en español). Me lo compré en una de mis paranoias de que no estaba produciendo suficiente y aproximadamente en dos días hizo efecto y me empezó a salir leche !! a chorros !!. Lo recomiendo mucho, pero con una bolsita es suficiente para producir de más una semana. Solo lo llegué a tomar en contadas ocasiones. El té que yo compré era Earth Mamma Angel Baby de Babies R Us, pero otra marca muy conocida es Mother´s Milk Tea disponible en muchos negocios en Estados Unidos como Target, Wal Mart, etc. Sin embargo cualquier presentación de dicha planta tiene el mismo efecto, ya sea en te, cápsulas, etc.

Mi Rorro y el famoso té




NUEVO SACALECHES Y OTROS UTENSILIOS

Finalmente un día me harté de estarme ordeñando manualmente (aunque por un tiempo me sentí muy cool y asombrada de poder hacerlo) y decidí comprarme otro sacaleches. A pesar de que tenía uno buenísimo y carísimo (que me fue heredado por Ash), por el reducido espacio no podía usarlo, así que me compré uno de Target de 20 dólares y la verdad me hizo la vida mucho más fácil.

Para lograr una lactancia exitosa compaginada con un trabajo de tiempo completo, el tiempo es oro. Por eso es necesario hacer tu vida lo más práctica posible. Los siguientes artefactos me sirvieron muchísimo para lograr mi objetivo:

1. Un buen sacaleches. Los mejores son los eléctricos y que de preferencia puedan sacar de ambos pechos a la vez, sin embargo yo no contaba con el espacio adecuado para sacarme la leche así que en mi caso uno manual sencillo fue la mejor opción. Cada una tendrá diferentes recursos y circunstancias por lo cual el sacaleches adecuado será distinto.

2. Frascos para almacenar leche. Mi papá hizo un viaje a San Diego y le encomendé bolsitas para almacenar y congelar leche, pero me trajo unos frasquitos de la marca Medela. Estos me fueron útiles porque ahí me sacaba la leche, pero eran muy pocos (solo 12) para las cantidades industriales que yo me sacaba. Entonces llegando a mi casa tenía que cambiar la leche a unas bolsitas desechables en las cuales congelaba la leche. También como me regalaron muchos biberones en mis Baby Showers y no los utilizaba el Goldo, yo los usaba para sacarme la leche o incluso para congelarla cuando ya no tenía bolsitas.

3. Bolsas de leche. Son lo máximo. Las compraba en Babies R Us también. Pueden ser de cualquier marca pero la marca de Babies R Us era la más barata y venían más. Son muy prácticas porque tienen un espacio para  poner nombre, cantidad de leche, fecha y fecha de expiración.

4. Hieleras. Mi hada madrina de la lactancia Ash, también me regaló una hielerita bien compacta, negra, con unas cosas de hielo que no se como se llaman que lo mantienen fresco. En esa hielera llevaba las lechitas congeladas a la guardería. Tenía también una loncherita con esas cosas de hielo, en donde guardaba las leches recién extraídas en el trabajo y después a mi casa. Eran mi equipaje diario.

5. Vasito tequilero: No, no es para que se echen sus shots, aunque pueden hacerlo si creen que lo necesitan. En realidad son para darle la leche materna al bebé cuando aún es muy pequeño, antes de darle biberón (preferible postergar el uso de biberón lo más posible).


6. Biberón Dr. Browns: según mis investigaciones y el consejo de Ash y de la Dra. Tagle, lo ideal es postergar el uso del biberón lo más posible, para evitar confusión de pezón (Nipple Confusion) en el bebé. Si es inevitable dar biberón, les recomiendo mucho el Dr. Browns pues por su sistema de aire, hace que el bebé succione de la misma manera que lo haría con un pezón real.

7. Crema para pezones: los primeros días o semanas la lactancia puede ser dolorosa, se pueden formar grietas e incluso haber sangrado (como en mi caso). Por eso se recomienda cada vez que amamantes poner un poco de tu propia leche en los pezones. Una crema a base de lanonina también puede ayudar. La marca no importa, el ingrediente secreto es lanonina, incluso en Dax se puede encontrar algo económico.


Sacaleches y té orgánico


MI PROPIO LACTARIO

Después de haber tenido un inicio muy difícil en el trabajo, por falta de confianza de mi parte, sentimientos encontrados, así como falta de apoyo, por fin un día me armé de valor para cambiar mi situación. Mi decisión tuvo que ver con mi hartazgo y con un poema que publicamos en este blog, sobre una mamá en Reino Unido que escribe un rap sobre la verguenza que siente al tener que amamantar en un baño. Ahí tomé aún más conciencia y pensé lo ridículo que era que por un lado tuviera un blog y un grupo como Crianza Alternativa, estuviera tan informada, y por otro lado no me atreviera ni a alzar la voz. ¿De qué servía entonces estar tan ''informada"?

Fui a hablar con la encargada de Recursos Humanos y exponerle mi caso y el hecho de que me parecía indigno y anti-higiénico extraerme leche en el baño. Para mi sorpesa se portó muy comprensiva y me ofreció varias opciones como una sala de juntas, una cocinita y una oficina vacía. Me dio mucho gusto y a la vez me sentí muy tonta por no haberlo pedido antes. Por fin se me asignó la cocinita que estaba cerca de mi oficina, le pusieron seguro y ahí tenía un espacio privado y cómodo. No es por seguir de quejumbrosa o por querer "poner dedo" pero he de mencionar que una colega que siempre se portó bien bruja "la hizo de pedo" y protestó, pero nadie le hizo caso. Otra colega súper linda me hizo un letrerito que decía "Ocupado, disculpe las molestias" y una carita feliz, el cual yo colgaba afuera de la cocinita cuando iba a usarla para que nadie me molestara. Todos sabían que era mi espacio y lo respetaban. Una amiga incluso, cuando preguntaban por mi y yo estaba haciendo lo mío, decía "Pau está en el Departamento de Lácteos".

Mi letrero



MISIÓN CUMPLIDA

Finalmente me llegué a sentir muy a gusto con mi logística y mi red de apoyo en el trabajo y en la guardería. El Goldo nunca necesitó usar fórmula y hasta la fecha. De hecho poco a poco fue tomando menos leche en la guardería y más sólidos y mejor reponía todas sus tomas cuando estabamos juntos y en las noches. Llegó a hacer lo que yo deseaba que hiciera desde que entré a trabajar, revertir sus ciclos o Reverse Cycling que es cuando por si solo el bebé realiza menos tomas cuando no está la mamá y se repone cuando están juntos, lo cual ayuda a necesitar menos leche extraída y a mantener una buenísima producción de leche y una lactancia exitosa.


Finalmente tomé una decisión de la cual no me arrepiento, ya que se me presentó una oportunidad de trabajar desde casa y de esta manera pasar tiempo completo con mi bebé. Llevo nueve meses en casa y ha sido una gran bendición ver a mi Goldo crecer, no perderme ni un solo momento y seguir amamantando a libre demanda. 

Como mi congelador estaba lleno de bolsitas de leche y aprendí que la leche materna es oro líquido, la doné toda a una amiga que la necesitaba para su bebé y fue una gran satisfacción. Por cierto pronto se inaugurará el Primer Banco de Leche en Baja California para facilitar dichas donaciones. 

Mi tesoro: congelador lleno


Amo mi carrera profesional y se que tarde o temprano regresaré a la oficina, creo que es un súper reto llevar una crianza con apego y trabajar tiempo completo, pero que las mujeres de hoy debemos de ser cada vez más creativas para lograrlo. Hoy en día es posible realizar muchos trabajos a distancia o como Freelance, o quienes tengan facilidad, poner un negocio o encontrar la manera de acomodar la vida profesional y estar presentes para nuestros hijos. Sin embargo no todas podemos tener el privilegio de pasar tiempo completo con nuestros bebés, hay diversas situaciones y casos, e incluso la decisión propia de continuar con un trabajo de tiempo completo, la cual es muy válida. Al final, la decisión es de la mujer siempre. Pero sí es necesario brindarnos apoyo mutuamente, compartir experiencias, tomar conciencia y también exigir cada vez más derechos ya que la maternidad nos engrandece, como una vez leí "No estamos criando plantas si no seres humanos", es decir, no es cualquier cosa, en nuestras manos están los futuros ciudadanos de nuestra sociedad y nosotras los estamos criando. Exijamos entonces el apoyo de la sociedad para criarlos.



ALGUNOS TIPS

Pasando a cosas que les puedan ser más útiles a las futuras madres/trabajadoras, les paso algunos tips que me funcionaron a mi:


1. Evitar biberones o chupones: como mencioné antes, lo ideal es evitar el uso de biberones el mayor tiempo posible, yo pude evitarlo toda la cuarentena ya que solo me separé de mi bebé un par de veces y solo un par de horas y en esas ocasiones, la persona que lo cuidaba le daba su lechita en vasito. Cuando ya entró a la guardería fue necesario el biberón. La Organización Mundial de la Salud recomienda evitar biberones o chupones (Recomendaciones de la OMS para la Lactancia Materna Exclusiva). El chupón nunca lo necesitó. Odio sonar extremista pero traté de deliberadamente no darle chupón ya que siempre sentí que estaba en desventaja o que la lactancia peligraba, entonces no quería utilizar substitutos. Aquí pueden leer lo que pienso del chupón.

2. La mamá nunca debe de darle el biberón: esto es básico. Mientras tú estés, es para recuperar el tiempo "perdido" en el trabajo. Si tú le das biberón a tu hijo, lo confundes. ¿Para qué darle biberón si estás presente tú? Muchas madres lo hacen por pena de amamantar en público, pero en verdad, he visto lactancias que no funcionan a raíz de que la madre les de biberón. Que el bebé siempre sepa que mamá = chichi. En la guardería me recomendaron ''Antes de que entre a la guardería váyalo acostumbrando a tomar biberón" y los mandé a la fregada. Evité el bibi lo más posible y jamás se lo di yo misma.

3. El Colecho: dormir con tu bebé es lo natural y tiene muchísimos beneficios, uno de ellos, facilitar la lactancia materna. Es especialmente importante cuando trabajas y te separas de tu bebé tantas horas al día, mantener el contacto físico piel con piel durante la noche.


EMPODERAMIENTO

En fin, son muchísimos temas que quiero abarcar, en estos 19 meses amamantando exclusivamente, puedo decir que me he hecho una experta en el tema. Lo que más me ayudó fue el apoyo de mi tribu, Crianza Alternativa, mis amigas, ya que siempre hemos compartido información, experiencias, hemos tenido un espacio para desahogarnos, quejarnos, aconsejarnos y apoyarnos. La Lactancia Materna es hermosa y vale totalmente la pena. Repito, cada mujer tendrá situaciones y experiencias diferentes y de ninguna manera es mi intención imponer lo que me funcionó a mi. Lo que sí quiero es compartir mi experiencia para que otras mamás trabajadoras vean que sí se puede y que utilicen los recursos y consejos que les sirvan.

Lo que sí es que como dijo mi hermosa doula Georgina "para que la lactancia funcione el 90% es que la mamá quiera". Yo estaba convencida y segura de que eso quería. La segunda parte fue contar con la información y el apoyo para empoderarme y exigir un espacio y condiciones apropiadas.

Espero que mi experiencia les pueda ayudar. Con amor,

Pau "la Embracilada"

Nosotros, 19 meses y seguimos amamantando



FUENTES

1. Nueva Ley Promueve la Lactancia Materna en México: http://crianza-alternativa.blogspot.mx/2014/04/decreto-oficial-promueve-la-lactancia.html
2. Este sitio es el más completo sobre Lactancia Materna: http://kellymom.com/
3. Este sitio es muy útil para Crianza con Apego: http://www.askdrsears.com/
4. Mi blog favorito de Lactancia: http://www.thebadassbreastfeeder.com/
5. Recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud para una Lactancia Materna Exclusiva: http://www.who.int/nutrition/topics/exclusive_breastfeeding/es/

Que es hiperémesis gravídica y porque puede arruinar nuestra experiencia del embarazo?


Foto tomada de www.womansgirls.com
Hiperémesis gravídica se refiere a las náuseas y vómitos presentes en mujeres embarazadas, que evolucionan de manera SEVERA, producen deshidratación, gran pérdida de peso, cetonuria y desequilibrio metabólico y electrolítico.” *



El día de ayer desperté con la noticia que la Duquesa de Cambridge (del Reino Unido) esta embarazada con su segundo hijo(a) y otra vez esta sufriendo de Hiperémesis gravídica. ¡Si OTRA VEZ! Creo que desde que yo sufrí de eso con en mi primer y hasta ahora único embarazo, es mi mas grande temor de embarazarme otra vez.



Durante su primer embarazo leí mucho sobre lo que era esa enfermedad y me dio hasta poquito gusto (bueno no tanto porque la verdad no se lo deseo ni a mi peor enemigo) que estuviera pasado por esto porque estaba dando a luz un tema que muchas mamás embarazadas sufrimos pero pocos nos entiende.  HG afecta un 2% de embarazos en Estados Unidos y ya esta siendo reconocido por médicos como una enfermedad que necesita tratarse con seriedad. No estamos hablando de las típicas náuseas y vómitos por la que casi toda mujer embarazada pasa, NO estas son náuseas tan extremas que vomitas hasta 15 (¡¡si 15!!) o mas veces al día, son náuseas tan extremas que pasas días sin poder comer un bocado, ni pan, ni galletas saladas, ni tomar agua puedes porque todo te causa asco.  Estos son vómitos que ya ni comida puedes vomitar porque no tienes nada dentro y te la pasas vomitando bilis (¡que es lo mas horrible y asqueroso que puedes vomitar!). 



Yo pase por esto, y lo pase severamente durante 5 meses y un poco mas leve durante 8 meses (y no se si cuenta pero vomite 3 veces durante mi labor de parto). Perdí 30 kilos en el proceso, no pude ocultar mi embarazo los primeros 3 meses en mi trabajo porque mis colegas veían mi cara flaquita, desnutrida, verde y pálida a la vez, me veían miserable y hasta se dieron cuenta que tuve que estar en reposo 5 días en mi casa con suero y era reposo en casa o ir al hospital Fue tanto el dolor que lloraba en el carro, en el baño del trabajo, en mi cuarto de que ya no aguantaba este dolor, ya no recordaba lo que era sentirse bien. Ya no recordaba lo que era que se me antojara una hamburguesa o una pasta, que es mi platillo favorito.  Todavía lo recuerdo y me salen las lagrimas porque entre en un momento de depresión muy fuerte, a veces queria cerrar los ojos y no despertar.  Nadie me comprendía, nadie se podía imaginar por lo que estaba pasando.



Ahora no estoy usando este espacio para quejarme, si no para platicarte lo por lo que pase y para informar a mamás que están pasando o pasaron por esto que NO ESTAN SOLAS, yo te entiendo y lo mas cliché que SI VALE TODO LA PENA, pero es importante tratar está enfermedad primero.  Y también para informar a los esposos, novios, parejas, abuelos(as), amigos, trabajadores, etc., que estamos pasando por un momento muy difícil que necesitamos el apoyo de todos.


Les comparto un articulo que leí sobre otra mamá que paso por lo mismo con 6 embarazos e hizo una lista de cosas que no queremos escuchar mientras pasamos por esto, esta lista incluye:



“Si realmente quieres este bebé, tu sola harás que dejes de vomitar” 



“ Toma un poco de té y unos crackers antes que te levantes de la cama, primero fuiste al baño (antes de comer algo) por eso estas enferma”  - (¡intente esto y NO FUNCIONABA!)



“La verdad no deberías quejarte, por lo menos no subirás de peso” – (no pero perdí 30 kilos y me veía anoréxica que es súper sexy [sarcasmo])



“El vomito es normal, le pasan a muchas mamas y no eres la única que pasa por esto”  - (Esta persona esta en mi lista de enemigos y ya se que es normal vomitar durante el embarazo lo que no es normal es vomitar 20 veces)
 

Ahora tengo una hermosa niña de 18 meses por la cual pasaria esto una y otra vez, porque como dije ¡SI VALE LA PENA!, pero no nomas porque valga la pena quier decir que tenemos que sufrir por eso, hay medicamentos que puedes tomar, remedios, y entender que reposo y cuidados de tu familia son importantes. Si sientes que pasar por hiperémesis gravídica, consultalo con tu doctor.  




-Dee























* SILVA, Claudia y PAGES, Gustavo. hiperémesis gravídica. Rev Obstet Ginecol Venez. [online]. sep. 2006, vol.66, no.3 [citado 08 Mayo 2009], p.178-186. Disponible en la World Wide Web: [1]. ISSN 0048-7732.

La exterogestación: la importancia de llevar en brazos a tu bebé y el porteo



“El bebé humano sigue siendo inmaduro mucho más tiempo que el canguro, pero mientras que el bebé marsupial goza de la protección de la bolsa de su madre durante su período de inmadurez, al bebé humano no se le concede tal ventaja natural.

Esta es una razón más por la que la generación de los padres de la especie humana deben entender claramente lo que realmente significa la inmadurez de sus hijos, y es que el bebé todavía continúa su período de gestación durante 10 meses más y que el nacimiento es el puente entre la uterogestación y exterogestación”
Ashley Montagu, Growing young.

Durante la uterogestación (embarazo) satisfacemos sus necesidades de forma involuntaria y automática: están alimentados, protegidos, calentitos y seguros mientras escuchan la voz y el corazón de su mamá que le reconfortan y tranquilizan.

Una vez que nace comienza la exterogestación (o gestación fuera de útero) y la mamá comienza a cubrir voluntariamente esas necesidades que contribuyen a su desarrollo físico, emocional y psicológico.

Nuestros hijos nacen buscándonos: nuestra voz les calma, nuestra piel regula su temperatura, nuestro pecho les alimenta y nuestros brazos les hacen sentir que vuelven a estar protegidos como en nuestro vientre, su hogar durante 9 meses.

Las mamás también nos beneficiamos de su contacto: físicamente, gracias a la lactancia nuestro útero recupera su tamaño y emocionalmente, conectamos y nos enamoramos más de ellos. Todo ello fortalece el vínculo madre-hijo y sienta las bases para su desarrollo posterior.

Llevar al bebé en brazos o portearle imita el ambiente del útero y la presión de la matriz, que junto con el balanceo de la madre, le crea un entorno familiar y de protección.

Lo más importante es que nuestro hijo recibe contacto inmediato: caricias, besos, abrazos…

Y se siente amado y tranquilo confiando en que sus necesidades estarán cubiertas.


Articulo original: http://www.portakanguritos.com/blog/2014/01/21/la-exterogestacion-la-importancia-de-llevar-en-brazos-y-portear-al-bebe-2/

Cómo sacar a tu hijo de tu cama

Una pregunta tan común de los papás que tienen a sus hijos durmiendo con ellos. ¿Cómo sacarlos? Desafortunadamente yo no tengo la respuesta, nadie la tiene. Todos los niños (y adultos) son diferentes y no hay una respuesta genérica que funcione por igual con todos. Lo único que sí puedo contarles es mi propia experiencia y cómo mi hijo Isaac, a los 6 años empezó a dormir en su propia cama. Aquí está mi historia de colecho.

Cuando Isaac nació no durmió inmediatamente en mi cama, al principio quise hacer todo de la forma “correcta”, me levantaba a darle pecho en el sillón, lo acomodaba en la posición más cómoda, contaba el tiempo, lo cambiaba de pecho… pero a las 3-4 semanas me quedó claro que no estaba funcionando. Isaac comía más de lo que yo dormía y se arrullaba mamando así que yo estaba agotada. Pasaba la mayor parte de la noche en el incómodo sillón, me dolía el cuello y estaba exhausta así que me pareció fácil pasarlo un día a mi cama. Esa noche dormí por primera vez desde que nació. Me sentí descansada y el niño durmió muy  bien también, despertaba y empezaba a pedir comida y yo solo me lo acomodaba y seguía durmiendo. La dinámica nos encantó. De este modo estaba cerca de él toda la noche, lo sentía, lo escuchaba dormir, estaba completamente enamorada y tenerlo cerca me pareció simplemente perfecto.

Sleeping baby, hay algo mejor?
Conforme fue creciendo se fue poniendo aún más fácil. Ya no era un frágil bebé pero aún necesitaba comer mucho en las noches. Yo dejé de notar cuántas veces comía porque ni siquiera tenía que despertar para alimentarlo, así dormitando podía hacerlo y seguir durmiendo.  Cuando cumplió 4 meses empecé a trabajar, y a pesar de que pasaba 8 horas fuera de la casa y lejos de él, tenerlo a mi lado en las noches me quitaba la tan natural culpa de dejarlo y seguía sintiendo el mismo apego; además de que amamantarlo en las noches ayudó a no dejar de producir leche y siempre ser capaz de sacarme la suficiente para que no fuera necesaria la fórmula. Trabajé poco tiempo y cuando tenía 10 meses regresé a quedarme en casa con él.

De ahí en adelante, el colecho siempre fue obviamente la opción correcta para nosotros, lo disfrutábamos muchísimo. Tenerlo cerca, despertar con él… sé que quienes lo practican entienden que hay pocas cosas en la vida mejores que abrir los ojos en la mañana y ver la sonrisa de tu hijo primero que cualquier otra cosa.  Es una cercanía difícil de explicar y no la cambiaría por nada.

Cuando empezó a crecer, empezaron a llegar los comentarios “¡¿todavía duerme con ustedes?!”, “¡al rato no lo van a poder sacar!”, “se va a hacer dependiente”… la verdad desconozco las fuentes de las personas que nos transmitieron esta información pero como inseguros papás primerizos mentiría si dijera que hicimos caso omiso. En un par de ocasiones realmente intentamos que Isaac se pasara a su camita, la cual teníamos en nuestro cuarto, pero inevitablemente en algún momento regresaba, a veces solo para que le diera pecho pero siempre volvía. La lactancia terminó cerca de los 2 años pero esa cercanía que sentía que teníamos, la seguí sintiendo al verlo dormir abrazado a mí y despertarme con besos y caricias.

Niño feliz 
Después ya Isaac tuvo su cama en su cuarto, la cual le acondicioné muy bonito para que le pareciera atractivo y quisiera irse. Intenté verdaderamente que se fuera a dormir allá, no porque yo no lo quisiera conmigo, sino porque a los 4 años ya la presión social era mucha, sentía que no podía mencionar el hecho de que dormía conmigo sin sentirme juzgada. Sin embargo, además de que me costaba mucho trabajo que se quedara dormido en su cuarto, se despertaba al rato y se pasaba a mi cama… y lo peor es que llegó el momento durante la semana de este intento en el que yo no podía dormir hasta que lo sentía llegar. Ninguno de los 2 estábamos listos para dormir separados pero por alguna razón yo quise forzarnos… hasta que leí una frase del Dr. Carlos González  que me gustó mucho y decía algo así como que no es asunto de nadie más que mío y de mi hijo cuándo se va a dormir a su cama (si alguien encuentra la frase exacta, le agradeceré ya que no la pude encontrar yo :S) así que ya, sin culpa alguna, le dije a Isaac que regresara a dormir conmigo, que nunca lo volvería a tratar de convencer ni forzar de irse y él no entendió muy bien mi cambio de opinión, me preguntó por qué y le expliqué lo mejor que pude que irse a su cuarto iba a a ser su decisión y no la mía y le ofrecí una disculpa por querer forzarlo. 

Esto duró hasta hace un mes aproximadamente cuando un día, así de la nada, me dijo que ya quería dormir en su cuarto porque ya había salido de preescolar y ya es niño grande. A eso yo le contesté que si él lo decidía, estaba bien, que yo estaba feliz de tenerlo conmigo, pero también estaría feliz de verlo dormir en su propia cama. Él muy seguro me contestó que ya lo había decidido y que esa noche empezaría. Y así fue. Desde esa noche, todas las noches ha dormido en su propio cuarto, en su propia cama, con su lamparita de noche. Yo lo acompaño a acostarse, me platica todo lo que nunca antes me había platicado (cómo le fue en su día, todo lo que hizo, a qué jugó) y le doy su beso de buenas noches, es un momento especial, solo de los dos.



Durmiendo en su cama ya
Admito que extraño verlo dormir a mi lado, extraño despertar y que él esté ahí, poder estirar la mano y abrazarlo… pero al mismo tiempo estoy feliz de verlo crecer, de ver que no fue difícil, que solo era cuestión de que él estuviera listo. No hubo llanto, ni castigos ni recompensas, fue la situación justo como soñaba que sucediera... Mi niño solito decidiendo que ya quería su espacio, que ya estaba listo. Estoy feliz de haberlo dejado hacer las cosas a su propio tiempo y que él sepa que siempre estoy para él y que apoyo sus decisiones aunque no lo fuerzo a tomarlas. Mi niño grande... ha crecido TAN rápido. Seis años de colecho puede sonar como mucho, pero ahora que terminó para mí se sintió como poco. Seis años de toda su vida que pasó durmiendo a mi lado son 6 años que jamás olvidaré. Son los recuerdos de él como bebé y niño pequeño que más atesoro junto con la lactancia.

Yo no les puedo decir cómo "sacar" a su hijo de su cama. De hecho creo que nadie debería sacar a ningún niño de donde se ha acostumbrado a dormir, de donde se siente seguro. Creo que cuando decidimos, ya sea de forma deliberada o sin querer (esa noche en la que estamos tan cansados que nos parece fácil) dejarlos dormir con nosotros, tenemos que tener el respeto de, al darles ese derecho, darles también el de decidir cuándo irse. Yo no "entrené" a mi hijo siguiendo una serie de pasos para irse a su cuarto. Lo único que hice ya sin siquiera esperar que con eso se fuera, fue decirle que él iba a decidir cuándo irse. Le di una alternativa, su cuarto cerca del mío, un lugar en el que se sintiera cómodo y seguro, y le dije que se podía ir cuando estuviera listo. No sé si él se habría ido antes si yo le hubiera dicho eso antes... ni nunca lo sabré. Lo que sí sé es que lo único que hice fue eso. Darle la opción sin presiones. Cuando quieras. Cuando estés listo. TÚ decides, no yo. Así en cada decisión de crianza que tomemos creo que tenemos que pensar ¿qué quiere el niño? Siempre tomarlos en cuenta y hacerlo con amor, pero sobre todo con mucho respeto, no tratarlos como a perritos que hay que entrenar, sino como humanos, personitas a quienes ayudar a aprender y tomar decisiones, ya que ser niños no significa ser incapaces. 

Si quieren aprender un poco más sobre colecho y la enorme cantidad de beneficios, les recomiendo al Dr. Carlos Gonzalez, él puede decirles la perspectiva de un doctor ya que yo solamente les platico mi propia experiencia como mamá, y si tienen alguna opinión o experiencia que quieran compartir, nos encantaría leerla.

-ash